1° GRADO
SEÑORITA LORENA SEÑORITA KATHERINE
Actividad Nº1: “Yo soy”
Terminar la actividad realizada en clases donde cada
uno debía dibujarse a sí mismo recordar agregar
esos detalles que me diferencian de otro como un
lunar, color de pelo de ojos, lentes etc.
¡Podemos aprovechar que están en casa y mirarse
en un espejo para ver si se olvidaron de algo!
Actividad Nº2: Atrapa la pelota.
Para esta actividad necesitamos dos círculos de
papel de colores o de revistas de distintos tamaños
(algunos niños ya los pegron durante la clase) que
deberán colocar arbitrariamente dentro de su hoja
de dibujo. A partir de allí se propone dibujar una
escena en donde dos personas o más participen de
una actividad donde el círculo se convierta en parte
de la obra.
Actividad Nº3: Pintar la silueta.
Mientras estamos en casa vamos a aprovechar para
practicar cómo pintar.
Recuerden que si movemos todo el brazo y pintamos
rápido seguramente nos vamos a pasar de los bordes
y el dibujo va a quedar tapado, para que nuestros
hermosos dibujos se luzcan mejor y se vean bien,
pintamos despacito de manera que solo mueva la muñeca.
A continuación envió una serie de siluetas para
practicar no salirme.
Pueden imprimir la hoja y agregarla a la carpeta
o hacer siluetas directamente dibujadas (pueden
copiarse las que se mandan o inventar otras)
para que los niños las pinten.
Actividad N° 4:
El recorrido del caracol.(Los grados que ya realizaron la actividad releer el cuento y
completar el dibujo para terminarlo).
Leer el cuento el rastro del caracol. Dialogar en familia sobre qué objeto se imaginan
que era el que descubrió el caracol Simón y lo convirtió en su hogar, dibujarlo y pintarlo.
Luego realizar el recorrido pegando lanas, hilo, trozos de papel o bolitas de papel,
teniendo en cuenta que será el rastro que dejaba el caracol a medida que avanzaba,
subía, bajaba,etc.
El recorrido del caracol.(Los grados que ya realizaron la actividad releer el cuento y
completar el dibujo para terminarlo).
Leer el cuento el rastro del caracol. Dialogar en familia sobre qué objeto se imaginan
que era el que descubrió el caracol Simón y lo convirtió en su hogar, dibujarlo y pintarlo.
Luego realizar el recorrido pegando lanas, hilo, trozos de papel o bolitas de papel,
teniendo en cuenta que será el rastro que dejaba el caracol a medida que avanzaba,
subía, bajaba,etc.
Materiales:lana,papel, hilos, etc. Plasticola, lápices de colores, fibras de colores,
hoja canson.
hoja canson.
El rastro del caracol. Cuento.
Había una vez un caracol muy curioso, que se llamaba Simón, que se pasaba el día
de hoja en hoja, comiendo ahora un poco de aquí, ahora un poco de allà. Se conocía
todos los rincones del jardín donde vivía, y había dejado su rastro de baba en todas
las plantas, árboles y arbustos. De hecho, los había probado todos. Algunos le
gustaban más y otros le gustaban menos, pero, en general, todo le iba bien.
de hoja en hoja, comiendo ahora un poco de aquí, ahora un poco de allà. Se conocía
todos los rincones del jardín donde vivía, y había dejado su rastro de baba en todas
las plantas, árboles y arbustos. De hecho, los había probado todos. Algunos le
gustaban más y otros le gustaban menos, pero, en general, todo le iba bien.
Un buen día, todo cambió. En el jardín había más movimiento de lo habitual y,
de repente, un objeto enorme – ¡por lo menos para él era enorme! - apareció
en uno de los rincones más alejados del jardín, justo bajo el limonero. Al principio,
el caracol Simón no hizo demasiado caso, ya que estaba bastante acostumbrado
a que los humanos le llenen el jardín con todo tipo de objetos extraños y desconocidos
que, para él, muchas veces, eran sumamente peligrosos. Es por ello que, en un primer
momento, no se atrevió a acercarse mucho. Se lo miraba de lejos y, durante algunos
días, lo estuvo observando para averiguar qué hacía. Pero el objeto no se movía, ni
hacía ruido. De hecho, pasaba casi desapercibido, ya que se confundía con las plantas
y el césped que lo rodeaban.
de repente, un objeto enorme – ¡por lo menos para él era enorme! - apareció
en uno de los rincones más alejados del jardín, justo bajo el limonero. Al principio,
el caracol Simón no hizo demasiado caso, ya que estaba bastante acostumbrado
a que los humanos le llenen el jardín con todo tipo de objetos extraños y desconocidos
que, para él, muchas veces, eran sumamente peligrosos. Es por ello que, en un primer
momento, no se atrevió a acercarse mucho. Se lo miraba de lejos y, durante algunos
días, lo estuvo observando para averiguar qué hacía. Pero el objeto no se movía, ni
hacía ruido. De hecho, pasaba casi desapercibido, ya que se confundía con las plantas
y el césped que lo rodeaban.
Pero nuestro amigo Simón el caracol era muy curioso y es por ello que, un buen día,
decidió acercarse un poco más a aquel objeto tan misterioso. Para comenzar, decidió
dar una vuelta de reconocimiento, pero no encontró nada interesante. El objeto en
cuestión no era comestible, no olía a nada, no se movía... En definitiva, era muy aburrido.
Entonces decidió subirse para ver si, más arriba, había algo que mereciese la pena.
Subió y subió y subió hasta llegar arriba. Pero tampoco encontró nada nuevo. Eso sí,
le pareció que, de su interior, venía un olor muy familiar, muy parecido al olor que
desprendía el bosque húmedo donde había vivido cuando era pequeño.
¡Qué recuerdos le traía aquel olor! Decidió que tenía que entrar allí dentro fuese
como fuese.
decidió acercarse un poco más a aquel objeto tan misterioso. Para comenzar, decidió
dar una vuelta de reconocimiento, pero no encontró nada interesante. El objeto en
cuestión no era comestible, no olía a nada, no se movía... En definitiva, era muy aburrido.
Entonces decidió subirse para ver si, más arriba, había algo que mereciese la pena.
Subió y subió y subió hasta llegar arriba. Pero tampoco encontró nada nuevo. Eso sí,
le pareció que, de su interior, venía un olor muy familiar, muy parecido al olor que
desprendía el bosque húmedo donde había vivido cuando era pequeño.
¡Qué recuerdos le traía aquel olor! Decidió que tenía que entrar allí dentro fuese
como fuese.
El caracol Simón buscó y rebuscó por todas partes y, al final, encontró un espacio por
donde escurrirse en el interior de aquello que no sabía qué era y que tanto le intrigaba.
Dentro todo era oscuro, muy oscuro, pero se estaba caliente y el buen olor que había
olido desde fuera, y que le recordaba tanto su niñez. Comenzó a desplazarse muy despacio,
con mucho cuidado, porque, a pesar de que el ambiente era muy agradable, sentía un
poco de temor. Enorme fue su sorpresa cuando, a medida que se adentraba en la oscuridad
más absoluta, sus antenas comenzaron a detectar montañas de hojas de lechuga, hojas
de achicoria, hojas de todo tipo y muchísimas verduras y frutas deliciosas! ¡No se lo
podía creer! ¡Aquello era el paraíso! Decidió, ni corto ni perezoso, que aquél sería, para
siempre, su hogar. Y dicho y hecho.
donde escurrirse en el interior de aquello que no sabía qué era y que tanto le intrigaba.
Dentro todo era oscuro, muy oscuro, pero se estaba caliente y el buen olor que había
olido desde fuera, y que le recordaba tanto su niñez. Comenzó a desplazarse muy despacio,
con mucho cuidado, porque, a pesar de que el ambiente era muy agradable, sentía un
poco de temor. Enorme fue su sorpresa cuando, a medida que se adentraba en la oscuridad
más absoluta, sus antenas comenzaron a detectar montañas de hojas de lechuga, hojas
de achicoria, hojas de todo tipo y muchísimas verduras y frutas deliciosas! ¡No se lo
podía creer! ¡Aquello era el paraíso! Decidió, ni corto ni perezoso, que aquél sería, para
siempre, su hogar. Y dicho y hecho.
Actividad N° 5: “Espacio”
¿Qué es el ritmo? es la forma en que sucede y se alterna una serie de cosas (movimientos, palpitaciones, acontecimientos, formas, etc.) que se repiten periódicamente en un determinado intervalo de tiempo o espacio. No solo encontramos ritmo en la música sino también en el arte o en nuestra vida cotidiana.
La consigna consiste en lo siguiente: salir al patio u observar desde una ventana el cielo nocturno. Tomarnos unos minutos para prestar atención a las estrellas en familia sobre los tamaños, forma, color, ¿son iguales?¿ Son diferentes? ¿La luna es de mayor o menor tamaño que las estrellas? ¿ y de los otros planetas que sabes? Te invitamos a viajar al espacio a través del siguiente video:.
Luego observar los distintos tipos de ritmos visuales que podemos encontrar en el arte y descubrir qué ritmo posee nuestra galaxia ¿seràn todos iguales los planetas o diferentes?
¡Si! ¡los planetas tienen ritmo porque son diferentes tamaños!
Dibujar en una hoja con lápices o fibras de colores, puntos como si fueran estrellas o planetas que forman parte de la galaxia generando diferentes tipos de ritmos.
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